La Granja Educativa «El Mansegal» se crea como espacio medioambiental y como un recurso complementario a la Formación Educativa de nuestros hijos. Pretendemos ofrecer a la población infantil la oportunidad de experimentar vivencias en contacto con el mundo rural en su rama agrícola y ganadera, haciéndola comprender las relaciones entre lo urbano, rural y natural, fomentando actitudes y comportamientos respetuosos con el entorno y una postura responsable ante la utilización de recursos naturales.
La Granja Educativa «El Mansegal» ofrece una amplia gama de actividades: ecología, etnografía, granja, piscicultura, juegos populares, helicicultura, educación vial, botánica, etc.
Todo aquel que quiera pasar un día de campo recomendamos que pasen por «El Mansegal» , ésta dispone de merenderos al aire libre y bajo techo, decorados con elementos que nos hace viajar al pasado. También disponemos de un horno de leña artesano, una obra realizada por el Maestro Albañil dombenitense Juan Casado Sánchez; en él se pueden realizar comidas que nos llevará a experimentar otros sabores totalmente distintos a los habituales.
La Granja se ubica en la zona norte de la Ciudad, en una Finca Municipal frente al Polígono Industrial San Isidro, y ocupa una superficie de 30.000 metros cuadrados.
El Centro de Interpretación nos da una idea de todas las instalaciones que podemos encontrar en “El Mansegal”. Es necesario entrar para no perdernos en la visita. Podemos contemplar paneles explicativos y, además, en el suelo, encontraremos varios dioramas en el que descubriremos los suelos y ecosistemas de la comarca de Don Benito.
En gran parte de la superficie que ocupa la Granja Educativa se pueden contemplar diferentes vehículos, máquinas, herramientas y utensilios utilizados antiguamente en la agricultura y ganadería. Estos elementos, perfectamente restaurados, se han recuperado para mostrarlos al público que visite la Granja en una improvisada exposición al aire libre. Cabe destacar una cosechadora de los años 50, fabricada en madera, una exposición de minerales y aula didáctica.
El ferrocarril ha sido muy importante para el desarrollo de Don Benito, pues era el más avanzado sistema de comunicación y transporte existente hasta la creación de la actual red viaria.
“El Mansegal” ha querido recoger este fenómeno en su interior, representado por diversos elementos ferroviarios de entre los que destacan una antigua locomotora de tren, que data de 1953, asentada sobre un corto tramo de carriles, con las señales y elementos viales necesarios para el normal funcionamiento de este medio de transporte tan importante hoy en día.
La Granja tiene como sistema de suministro de electricidad la energía producida por una central de placas solares fotovoltaicas, que ocupan una gran parcela de la superficie de la granja. Esta sección de la Granja también tiene su lado educativo, pues las personas que visitan este complejo conocen in situ la instalación, la mecánica del funcionamiento de los paneles, producción y formas de aprovechamiento de la energía (autoconsumo, venta de la red normal, etc.).
La central eléctrica tiene un sistema natural de defensa contra incendios, pues el herbazal del suelo que ocupa es comido a diente por los numerosos burros, mulos y caballos que viven en la Granja.
En el vivero se pone a disposición de los visitantes, fundamentalmente de los escolares, el material necesario para que puedan plantar un árbol (contenedor, turba) o sembrar semillas, y dejarlo allí para que se desarrolle o llevárselo a su domicilio o colegio para atender su crecimiento. En estas dependencias se expone un abundante número de plantas y especies arbóreas, tanto autóctonas como de otras Comunidades Autónomas.
Las personas jubiladas tienen su espacio en el interior de la Granja, pues una pequeña superficie de la misma está dedicada para que todos aquellos que lo deseen, previa solicitud, puedan trabajar una parcela de tierra dedicada a huerto, donde las verduras y hortalizas que se produzcan sirvan para el autoconsumo. El agua de riego es proporcionada por los servicios del Ayuntamiento. En las dependencias de la Granja dedicada al huerto los mayores tienen las herramientas y pertenecías propias guardadas y vestuario propio.
Se plantea esta actividad como objetivo de mejorar su calidad de vida a través del ejercicio físico que requieren las labores agrícolas, el contacto con la tierra y la naturaleza, y la producción y consumo de alimentos sanos.
El jardín botánico ha sido diseñado como zona de paseo y descanso para los visitantes. Recorriendo las calles del mismo se puede contemplar en las distintas parcelas numerosas especies de árboles (forestales, frutales, de sombra, ornamentales, etc.), arbustos, plantas aromáticas, palmeras, cactus, etc. Las plantas están agrupadas por familias, cada una de ellas en diferentes eras de siembra. Todas las calles confluyen radialmente en un espacio central donde hay construida una pérgola circular con bancos para el descanso de las visitas.
La función de este espacio es fundamentalmente didáctica, aunque en el caso del gallinero, donde se recogen ejemplares de diferentes razas de gallinas, se trata también de poner en valor o recuperar especies tan perdidas en el tiempo como la Gallina Azul Extremeña o la Gallina Blanca Extremeña, raza autóctona que es objeto de un plan de recuperación a nivel regional. Se puede contemplar además la Gallina Negra Castellana o la exótica Gallina de Guinea, así como el estilizado y clásico pavo negro de los cortijos de Extremadura.
Otra especie llamativa que podemos apreciar es la Avestruz, especie que ha surgido últimamente como una alternativa a la ganadería tradicional.
En esta sección se recogen especies de animales domésticos como ovejas, cabras, burros, ponys y caballos. El planteamiento de esta mini granja es variado, aunque lo fundamental es la versión educativa. Los visitantes más jóvenes incluso pueden acercarse, tocar, manejar los animales, ordeñar las cabras, ver amamantar los cabritos y corderos o dar un paseo en el carro enganchado al burro. En esta sección están recogidos animales autóctonos, de los cuales se puede conocer su raza y biología, como la raza verata (cabra), formas clásicas de aprovechamiento y explotación, con descripciones que suponen una forma de puesta en valor de los mismos.
Con una superficie de 170 metros cuadrados, está destinada a la realización de todo tipo de talleres medioambientales.
Este espacio cuenta con un amplio comedor para el descanso de los visitantes durante su estancia en la Granja Educativa.